Chalets, velas de wind-surf, vídeos, teles a color o hasta "pesetas rubias" eran algunos de los premios que se podían ganar, con mayor o menor dificultad, hace ya algunos años con las promociones que hacían muchas marcas conocidas. Recordamos los obsequios del pasado:
En los años 80 era posible ver a alguien practicando deporte con un chandal Danone o llevar a la playa una toalla Danone, porque la "moda Danone" se impuso con camisetas, toallas y hasta velas de wind-surf que regalaba esta conocida marca:
Los pastelitos Bony, en 1978, para festejar la llegada de los Globetrotters a España, hizo un concurso en el que se podían ganar como premios teles a color, discos, libros, bicicletas todoterreno y cámaras de fotos
Esta tal vez sea una de las formas de conseguir premios más difíciles de la historia: para lograr ganar 50.000 pesetas hacía falta adivinar primero la cantidad exacta de granos de arroz que contenía el "bote misterioso" de La Lechera. ¿Esto lo acertaría alguien? Parecía hecho para adivinos o para ahorrarse un premio que salía algo caro para la época... (la promoción es del año 1929)
En tiempos en que la mayoría de la gente tenía tele en blanco y negro, la marca Royal regalaba teles a color
Un billete de peseta nuevo o "pesetas rubias" llegaron a ser un regalo de las marcas en el pasado: en 1959 el detergente Dionil, por el "Día del Obsequio", regalaba a quienes compraban este "insuperable y mágico detergente", además de los billetes de pesetas y las pesetas rubias, calendarios de bolsillo, novelas, ceniceros, viseras antisolares, etc.
¿Y quién ganaría el Cobi de oro?