Recordar muchas de las golosinas que tomamos en la infancia es demasiado complicado de resumir en una sola entrada del blog, pero en esta pongo algunas de las muchas que merecen un homenaje por formar parte de los muchos buenos momentos de nuestro pasado:
Hay tres chicles que durante los años 80 compitieron por ser el número 1: Boomer, Bang Bang y Cheiw. Eran las tres marcas más compradas de aquella época (aunque los chicles Dunkin tampoco tenían un mal lugar), todos tenían azúcar y los típicos sabores de menta, fresa. Cada uno de ellos tuvo sus sabores particulares, como el sabor chocolate de los chicles Bang Bang, el mítico sabor cola de Boomer o el sabor canela de Cheiw. Como en otras entradas del blog ya he hablado sobre Boomer y Bang Bang, ahora comentaré sobre el desaparecido chicle Cheiw.
Los tipos de Cheiw más conocidos fueron los de sabor fresa ácida (el preferido de la mayoría de quienes lo probaron), fresa, clorofila y menta
En 1980 Juan Pardo compuso el jingle de uno de sus anuncios y hasta llegó a ser grabado en vinilo (sí, esta década tenía ese tipo de fenómenos extraños)
Este chicle aproximadamente se vendió hasta los años 90, perdiendo por completo aquel lugar destacado que consiguió a partir de los años 70. Este fue uno de los envoltorios que tuvo a mediados de los 90, con el monigote del envoltorio como mascota (por así decirlo) que tuvo esta marca en su última etapa y que recuerdo que salía en los anuncios de Cheiw de aquella época:
Como curiosodad comento que Cheiw en los años 90 compitió con el chicle Kilométrico Boomer vendiendo otro chicle extra largo llamado Disco Cheiw (que una vez se metiera todo en la boca haría una enorme goma de mascar que casi no dejaría hacer globos)
Y para no perder tradiciones este tipo de nuevo y extra largo chicle tuvo un CD (algo más movidito que el de 1980, los tiempos cambian)
¿Te acuerdas de Pita Gol? El caramelo que también era silbato y dejaba la boca pegajosa del azúcar del caramelo después de estar una y otra vez soplando. Era perfecto para poner de los nervios a todo el que estaba a nuestro alrededor ...
Más que mítico es Peta Zetas, que si buscas su definición en la Wikipedia parece más una lección de química que la descripción de una golosina "es un caramelo carbonatado (...) su característica más destacable se encuentra en la exposición de sus ingredientes al anhídrido carbónico que se queda atrapado en el caramelo" y bueno, poniéndonos más sencillos, decir que una vez tomábamos esa golosina daba un efecto de efervescencia parecido a una aspirina y un pica pica, pero con sabor a fresa. Para hacer más amena la clase de química en el instituto nos podían haber dejado hacer algún trabajo con los Peta Zetas ...
Estos también se anunciaban conjuntamente con otra golosina llamada Magic Gum de la que poco se sabe (ni le valió la publicidad conjunta con una de las golosinas estrella de los 80)
También se promocionaron en cómics, era un tipo de publicidad usado bastante por ese entonces que también utilizaron marcas como Quesilete, Nesquik, etc:
Los caramelos Drácula (o Vampiros, nombre actual), que todos sabemos que su principal cualidad era dejarnos la lengua roja y luego ir enseñando la lengua a los demás para supuestamente asustarlos. Tenía un sabor a fresa muy dulzón que recuerdo muy bien. Todavía se venden pero ahora son más orientados a la fiesta de Halloween que para consumo del día a día...
Estas cortezas de Matutano llamadas Chipinas son toda una rareza, son de 1983, eran flores de patata (sí, así como se describe en el envase) y no tenía ni idea de que existieron, es una de las sorpresas que me encunetro buscando por internet. La verdad que queda un poco raro y hasta ridículo decir "estoy tomando flores de patata", esa descripción poco animaba a comprar el snack ...
Y los pastelitos Bucaneros se anunciaban siempre junto a Bony y Tigretón. Bony y Tigretón siguieron (bueno, volvieron), pero estos bizcochos rellenos de crema parece que no han logrado continuar aunque hace unos 4 años se pusieron de nuevo a la venta. Ahora los pastelitos Bony además de estar rellenos de mermelada de fresa, también llevan crema en homenaje al recordado Bucanero