sábado, 5 de julio de 2014

Errores de las marcas.

A algunas marcas les fue muy bien con su primer producto, pero con otros que sacaron más adelante de forma alternativa al producto principal fue todo lo contrario.
Wipp probó suerte con un detergente de vajillas: Wipp Vajillas, que apareció en el año 93 (sí, y con el mismo lema que con sus detergentes "el frotar se va a acabar"), pero esta marca y su famosa frase sólo funcionan con sus clásicos detergentes para la ropa y con esa similitud que pretendieron poner con su detergente de vajillas (en lema y hasta en envase de mismo color y diseño) parecía como si al fregar platos hubiera error y se hubiera echado el detergente para la ropa, de modo que pasó a la historia al poco de comenzar a venderse. En el minuto 1:58 de este vídeo hay un anuncio de este producto:


(Vídeo subido por el usuario de You Tube Solojinglesradio).

En 1993-94 la marca Pascual sacó tres tipos de cereales: Ñampa Zampa, Trogloditos y Boskys, cada uno de ellos tenía unos personajes, se anunciaban por separado y tenían una canción que intentaba darle una identidad a ese nuevo producto y sus personajes. Los cereales Boskys, representados por unos duendecillos fueron los primeros en fracasar, y el que más tiempo duró fue Ñampa Zampa que pasó a ser más tarde de PMI:



Yoplait quiso hacer un yogurt parecido a Petit Suisse y creó Le Suisse, que estuvo vendiéndose desde principios de los años 80 hasta más o menos 1990, era demasiado parecido al Petit Suisse original (envase, colores, logo, nombre casi similar, finalidad del producto, ...) y la falta de originalidad y el abuso de copia suelen garantizar el fracaso:


Ligeresa, en 1992, lanzó una leche desnatada para mantener la línea (y acompañarla con sus margarinas o mermeladas). Para intentar darle un toque distinto a la competencia le añadieron a esta leche vitaminas A, D y E, pero ni así resultó. En el minuto 4:31 de este vídeo está el anuncio:


(Vídeo subido por el usuario de You Tube Paku76)

Danone en 1995-96 vendió los yogures Casper. Eran de tres sabores: cereza, cola y chicle, pero no estuvo mucho tiempo y poco sirvió la popularidad que tenía ese personaje en aquella época:




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